Luego de pasar con éxito dos fases de la apertura de los templos, la Arquidiócesis de Cuenca, inicia la fase tres, donde ya se permitirá celebrar la Eucarsitía con la participación de fieles con el 30% de la capacidad de la iglesia. Pero, de igual manera, que las primeras etapas, estará sujeto al horario de toque de queda, incluidos los fines de semana, que disponga el COE cantonal.
Sin embargo, aún no se permitirá la asistencia de grupos vulnerables, como por ejemplo: personas mayores de 65 años, enfermos y con capacidades diferentes. De igual manera, no habrá reuniones de los grupos apostólicos, ni se permitirá la utilización de aulas para ningún evento, que congregue a las personas.
La celebración de la misa, estrictamente se permitirá con aforo reducido, sin superar el índice de asistencia establecido en el protocolo para el período de emergencia y con las mismas medidas sanitarias de prevención de la fase 1 y 2. Es decir, que no supere el 30% de asistencia de feligereses, de la capacidad del templo, distanciamiento de 1.5 metros, entre una y otrta persona, normas que estará sujeto al control del personal de apoyo para que se cumpla extrictamente las medidas de bioseguridad.
Para incrementar la participación de las personas a la misa, cuidando el distanciamiento establecido, se podrá aumentar el número de celebraciones, durante cada día. Para ello, el sacerdote deberá pedir el respectivo permiso al Obispo, luego de consultar al Vicario Episcopal de la zona y al delegado de bioseguridad. En esta fase se prevé solamente la celebración del sacramento de bautismo y de matrimonio, con el aforo permitido y respetando todas las medidas sanitarias, expuestas en las fases 1 y 2.
En la fase tres, las exequias, se pueden realizar respetando el aforo del 30% de capacidad del templo y con las mismas medidas sanitarias previstas en las fases 1 y 2.
