El traje del Niño Viajero está bordado con hilo de oro, traído exclusivamente de Italia para este fin.
El Niño Viajero ya tienen su nuevo traje para la gran Pasada del 24 de diciembre. El vestido ha sido cariñosamente elaborado durante tres meses por las hermanas del Monasterio de la Asunción, custodias de la sagrada imagen.
El atuendo está confeccionado en seda azul. Contiene hilo de oro traído de Europa y perlas que vienen de EEUU. Como en años anteriores, ha sido la Hermana Ana María del Niño de Praga, Abadesa del Monasterio, la encargada de esta tarea.
Lograr el diseño adecuado para traje del Pase, es una tarea que toma su tiempo. Bordarlo es más fácil, aquí colaboran tres hermanas del claustro.
No obstante, la imagen cuenta con muchos vestidos donados por los devotos, éstos son utilizados en las diferentes celebraciones como el pregón, la novena y la visita a las diferentes instituciones.
Para la abadesa, en este 2022, el traje azul pretende representar al cielo. Las perlas y flores bordadas, pretenden imitar a esa multitud que camina y brilla junto al Niño Viajero, en un homenaje ofrecido con mucho amor y fe desde la tierra.
Vestir al Niño es un acto muy especial. Desde hace más de veinte años, lo hace la hermana María Bertha de la Santísima Trinidad. “Es una emoción muy grande, mientras lo hago pienso como la Santísima Virgen estaría vistiendo a su divino hijo, y trato de unir mis pequeños sentimientos a los de ella, para que el Niño quede hermosamente vestido”, comenta la religiosa.
“Si el traje no le gusta al Niño, vestirlo toma más tiempo, pues no se deja, no le queda bien el vestido y hay que volverlo a poner hasta que quede bien”, señala.
La hermana Leonor María del Espíritu Santo nos invita a vivir esta fiesta con fe, amor y devoción a “Dios mismo, que viene a este mundo como un niñito pequeño para salvarnos”.
