La iglesia católica del Ecuador, el 26 de julio de cada año, celebra la fiesta de los padres de la Santísima Virgen María y abuelitos de Jesús, San Joaquín y Santa Ana. Por este motivo, la Arquidiócesis de Cuenca, a través de sus pastores, Monseñor Marcos Pérez y Monseñor José Bolívar Piedra, junto a todos los presbíteros, celebraron este día con una Eucaristía alegre, en este año, transmitida por redes sociales, para que pueda llegar a todos los abuelitos del Azuay y del mundo.
Monseñor Marcos Pérez, en su mensaje, señaló que a los dos santos, los conocemos por el gran fruto que dieron a la humanidad, a la Virgen María, dotada de muchas virtudes, sobre todo, de su entrega, generosidad y humildad. Por este motivo, la iglesia, les tiene un cariño especial. Además que nosotros también podemos acércanos a los abuelitos de Jesús para pedirle todas nuestras necesidades, sobre todo, aquellas relacionadas a la familia, en estos momentos que atravesamos por crisis emocionales, afectivas, económicas, de amor y de fidelidad.
La Iglesia Católica, narra que San Joaquín y Santa Ana, fueron personas de profunda fe y confianza en Dios; y los encargados de educar en el camino de la fe a su hija María, alimentando en ella el amor hacia el Creador y preparándola para su misión.
Por este razón, el Papa Benedicto XVI, el 26 de julio de 2009, resaltó, a través de las figuras de San Joaquín y Santa Ana, la importancia del rol educativo de los abuelos, que en la familia “son depositarios y con frecuencia testimonio de los valores fundamentales de la vida”. Y en 2013, también el Papa Francisco, en la Jornada Mundial de la Juventud, Río 2013, destacó que los Santos Joaquín y Ana, forman parte de esa larga cadena que ha transmitido la fe y el amor de Dios, en el calor de la familia, hasta María que acogió en su seno al Hijo de Dios y lo dio al mundo, nos los ha dado a nosotros. ¡Qué precioso es el valor de la familia, como lugar privilegiado para transmitir la fe!”.
De tal manera, que es momento de escuchar a nuestros abuelitos, que en su largo camino, han acumulando mucha sabiduría y aprendizaje, que están dispuestos a compartir con nosotros.